MIERCOLES DE CENIZA
Llega y pasa hasta nuestros adentros, sin hacer ruido, resurgiendo de tu propia ceniza, como Ave Fénix concitando el repeluco que supone mirar hacia un marcador que cuenta los días. Todos en ti reparan hoy, incluso los desvinculados, sienten el escalofrío improvisado de quien se lo recuerda…Recuerdos, la vida es vana sin recuerdos y hoy es de esos días en que el hombre se apoya en el bastón de sus mayores, de su cultura, de la tradición en una palabra: de los sentimientos. Tan sentido es todo a partir de hoy Miércoles de Ceniza, que no sé si es más bonito quedarse en el camino que cruzar la meta. Recta final de premura de naranjos, de aire transformado en brisa que nos acerca
Auroras y atardeceres que nunca acabaremos de reconocer, porque la mirada es un niño
De cuarenta primaveras con zapatos nuevos. Si no te lo crees, alza la mirada hacia el perfil de la torre, verás el primor del cielo, que aunque gris –como la ceniza que hoy se hace cruz sobre tu frente- siempre esconde el azul indecible de Sevilla. Conviértete…no hay Porvenir sin Luz, ni ramo de novia sin azahar, ni sueño sin la Estrella de un nuevo Domingo de Ramos.
