a FAUSTINO Cabello
mi profundo sentimiento y admiración
#MedallaDeAndalucía
@romeristas
#LosRomerosDeLaPuebla
mi profundo sentimiento y admiración
#MedallaDeAndalucía
@romeristas
#LosRomerosDeLaPuebla
Yo quería escribir, que ellos fueron
los “Beatles” de mis catorce-quince años. Quería escribir que
mi madre, compró sus primeros “single´s” en Elcortinglés,
para meterme en las venas la alegría de aquellas sevillanas de “Mi
caballo está inquieto/La Niña de los Peines/Sevillanas del
recuerdo/Sevillanas con duende/del Aljarafe/del enamorao/de los
chavales/de los emigrantes. Yo quería escribir, que ellos fueron mi
referencia en la poesía escrita para bailar de Aurelio Verde/Moya y
Felipe Campuzano en los arreglos del glorioso piano de cola; quería
escribir que fueron la banda musical de aquellos años de
bachillerato, cuando un grupo de compañeros, quedábamos al final de
clase, en la misma aula, para ensayar a dos voces, la fantasía de
ese “Embarque del ganao/ Las flores de la discordia, no crecen en
el Rocío/Corraleras del Pueblo/la Marisma... Sinfonías por
sevillanas, que consagraba a estos “Beatles de la Puebla”, como
nuestros Romeros; los más modernos de los más clásicos; los más
aventajados discípulos de los Toronjos y los Reyes de Castilleja de
la Cuesta; los primeros en cantar en grupo desde el principio y
¡hasta que lo quiera Dios: Los Romeros de la Puebla!
Y Hoy,
escuchando mis sevillanas del ensueño, aquellas que le ponían letra
y música a ese primer amor, que dicen, no se olvida, transido de
emoción, termino -como ayer- con los vellos de punta y los ojos
vidriados, cantando el “Rompeolas del amor”, como aquel joven que
las cantaba a coro con sus amigos, sentado a la espalda de un banco
en la Alameda, para llamar la atención de las niñas, de todas las
edades, que se enamoraron con “Los suspiros del amor de aquel
¡Silencio, por lo que vdes mas quieran, guarden silencio, por Dios,
que es tiempo de primavera y están hablando de Amor!”. “Se fue
la primavera de mi vida y sigo enamorado”...llegó el verano, ¡VIVA mi Andalucía! y parte del extranjero, cantando “La novia del
Campesino” por rumbas o sevillanas -las sevillanas- de siempre-
desde la“Arena de los bajos de Punta Umbría, hasta la “isla de
cal salada”...y llegó Septiembre: “estaba tirando cuenta y me
empecé a preocupar”...no, no era por aquello de la medalla de
Andalucía para los Romeros de la Puebla...era por algo mucho más
profundo, entrañable, trascendente...”Pero la copla decía/todo
termina en la vida/ y el tiempo dá la razón/ Los Romeros de la
Puebla/ cantando dicen adiós...¡quien dijo cantares -como escribió
el poeta-dijo Andalucía!...En septiembre y con la luna -vendimiadora
y caliente- y aunque parezca mentira/ al llegar un nuevo día/ yo me
suelo preguntar/ ¿Porque es tan corta la vida, cuando se mira
“patrás”?..
.Por el potrillo del tiempo galopo hacia mi
niñez/Aquel fandango primero que de niño yo canté/ y la emoción
del aplauso/ que nunca podré olvidar/ Al subirme a un escenario por
primera ve a cantar....¡Cantemos, Romeros...que las puertas del
cielo se abren al grito del sol y a la Blanca Paloma, cantemos, un
himno de amor!...¡Solano de las Marismas/ Tu que alisas las
arenas...-dile por fín a FAUSTINO, que no hay camino de vuelta!...
“To el que ha visto alguna vez/ a la Virgen tan de cerca/ No puede
decirle ADIOS/ aunque los tiempos se vuelvan”